Educar a los hijos: entre el amor y los límites

Como adultos y padres creemos que los niños deben aprender a reconocer y respetar límites. Dentro de esta afirmación, aceptamos que nosotros somos responsables de que nuestros hijos lo hagan e identifiquen cada determinación que hacemos para ponerles estos límites pero a veces debemos entender que nuestros hijos necesitan autorregulación para entrar en el sistema de obligaciones y empezar a salir del círculo de las limitantes.

Qué pasa? Que con frecuencia, casi siempre como padres primerizos, nos convertimos en personas blandas, permisivos, flexibles, tolerantes y sobreprotectores dando como resultado un hijo «emperador». Aquellos hijos que nos toman la medida, que ya no se asustan con las palabras ni los castigos porque al final saben que no se los vamos a cumplir y qué pasa? incluso se decepcionan del sistema. Piénsalo: los niños gritan límites.

Hoy quiero recomendarte el libro «Entre el amor y los límites» del Dr. Jorge Eslava quien busca entregar a los padres modernos un apoyo para mantener el equilibrio entre el amor y los límites. Aquí encontrarás reflexiones, argumentos y sugerencias sobre como enfrentar algunos de los retos de la crianza.

Se proponen herramientas para ayudar a los hijos en la construcción de un sentido de la autorregulación que vaya acorde con los procesos que está viviendo; desde el paso por la escuela de una manera más eficiente hasta tener una vida (en lo personal) más productiva y feliz ayudándonos a nosotros los padres a disfrutar el proceso.

Que no se nos olvide que nosotros también fuimos jóvenes y venimos de romper reglas, de irnos de pinta, de no hacer caso en casa. Ellos también necesitan diversión pero no hay que olvidar que nosotros somos los encargados de su educación y es nuestra obligación velar por ellos. Es importante encontrar el lenguaje preciso para decirles «te amo, siempre te amaré pero tienes obligaciones».

La autorregulación es una técnica de disciplina que se debe practicar poniendo tareas específicas (muchas veces difíciles de cumplir) hasta que se convierta en una rutina. Los más exitosos empresarios tienen hábitos muy básicos convertidos en rutina, considerada por ellos, la mejor forma de disciplinarse en el mundo empresarial.