Cómo manejar berrinches sin perder la cabeza

Controlar el berrinche de nuestros hijos puede ser tan sencillo o tan difícil como queramos ver la situación. Es importante aprender en esos casos a escuchar a nuestros hijos e ir documentando en qué ocasiones suelen hacer berrinches.

Regularmente nuestros hijos pueden tener berrinches a muy corta edad porque es la manera en que ellos han aprendido a tener lo que quieren. Sin verlo como algo negativo, este tipo de situaciones son provocadas porque ellos no han aprendido a controlar sus emociones, es decir, su inteligencia emocional es muy inmadura aun.

Nosotros como padres, debemos ayudar a nuestros hijos a entender por qué tomamos cierto tipo de decisiones; debemos ayudarles a entender por qué un día si les compramos dulces y otro día no o por que hoy si pueden ver la tele y otro día no. Cuando se presenten ese tipo de situaciones, será más fácil hablar con ellos y hacerlos entrar en razón.

Si estás enfrentando un berrinche, intenta lo siguiente:

  • Evita perder el control
  • Trata de estar a su nivel (siéntate en el suelo o en una silla pequeña)
  • Utiliza palabras simples, preguntas simples
  • Conversa con un tono de voz tranquilo
  • Ofrece reconocimiento, regaña, termina con una propuesta
  • Contén el enojo de tu pequeño con un abrazo
  • No des explicaciones largas
  • Cuando haya pasado el berrinche, pregunta qué paso y cómo lo hizo sentir

Será mucho más fácil en el futuro explicarle con cosas simples y antes de que se presente su crisis la razón por la cual estás tomando ciertas decisiones. Por ejemplo:

  • Vamos a salir al súper pero no puedo comprarte dulces.
  • Hoy vamos a ir a la tienda departamental pero no vamos por videojuegos. Más adelante, podemos ver tus calificaciones y hacer un esfuerzo para comprarte uno si saliste bien.

Estas situaciones harán que, llegado el momento del berrinche, puedas explicar con claridad o comentarle «ya lo habíamos platicado en la casa». Siempre intenta mantener una conversación adulta con tus hijos, diciendo la verdad ante cualquier situación para que ellos puedan ir controlando su parte emocional.